- Nueve personas han sido detenidas, cuatro de ellas menores de edad, acusadas de presuntos delitos de pertenencia a grupo criminal, corrupción de menores, inducción al abandono del domicilio familiar, tráfico de drogas y delito contra la seguridad del tráfico
- Dos de las menores detenidas trataban de convencer a otras jóvenes para que se fugaran del lugar y se iniciaran en el mundo de la prostitución
- Tras fugarse del centro, las menores acudían a un domicilio cuyo propietario les ofrecía sustancias estupefacientes y donde las jóvenes trasformaban su apariencia física para parecer mayores y pasar desapercibidas
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Alicante a nueve personas de diferentes nacionalidades, cuatro de ellas menores de edad, acusadas de delitos de pertenencia a grupo criminal, corrupción de menores, inducción al abandono del domicilio familiar, tráfico de drogas y delito contra la seguridad del tráfico, al formar parte de un grupo criminal que, presuntamente, incitaba a menores vulnerables a abandonar el centro donde se encontraban ofreciéndoles sustancias estupefacientes y facilitándoles que ejercieran la prostitución. En dicha investigación se ha localizado a dos víctimas de 15 y 16 años de edad, resultando una de ellas, a su vez, también detenida.
La denuncia, es este caso, fue interpuesta por la dirección del centro de protección donde se encontraban las menores, donde observaron su anómalo comportamiento. Según el relato de la denuncia, las menores podrían estar siendo inducidas y ayudadas por otra menor del mismo centro a abandonarlo para iniciarse en el mundo de la prostitución.
Un domicilio en el que las menores cambiaban su apariencia física
Con esa información, los agentes comenzaron la investigación, determinando en un primer momento que las menores acudían tras fugarse a un domicilio próximo al centro de protección, cuyo propietario favorecía su permanencia en el mismo, les ofrecía sustancias estupefacientes y donde, al parecer, las jóvenes trasformaban su apariencia física para parecer mayores y pasar desapercibidas, llegando incluso a teñirse el pelo.
Posteriormente eran trasladas a otro domicilio situado en una céntrica calle de Alicante, propiedad del considerado cabecilla de la banda, de nacionalidad rumana y, según los investigadores policiales, encargado de gestionar los clientes y las citas de las menores. En este domicilio, a las menores se les ofrecía sustancias estupefacientes y bebidas alcohólicas con el fin de alterar su comportamiento, llegando el investigado a abusar sexualmente de las menores.
En este piso también se grababa a las jóvenes en actitudes sensuales. Esos vídeos se compartían en redes sociales y, presuntamente, eran utilizados para ofrecer sus servicios sexuales.
Trasladadas en vehículos de alta gama para ser prostituidas
La organización tenía repartida las tareas de cada integrante. De esta manera, uno de los detenidos era el encargado de trasladar a las menores en un vehículo de alta gama a diferentes lugares de toda la provincia donde, presuntamente, se prostituían, facilitándoles también sustancias estupefacientes y llegando él mismo a mantener relaciones sexuales con las menores a cambio de una contraprestación económica.
Dos de las menores detenidas trataban de convencer a otras jóvenes para que se fugaran del lugar y se iniciaran en el mundo de la prostitución. Concretamente, una de ellas se encargaba de dar las indicaciones de lo que debían hacer respecto a las víctimas, dónde llevarlas, cómo cambiar su aspecto físico, cómo facilitarles drogas y alcohol.
Conseguida toda esta información, y una vez que los agentes lograron identificar a los miembros del grupo, se estableció un dispositivo policial especial que localizó y detuvo a los investigados, a excepción del considerado cabecilla de la banda, que unos días antes del mencionado operativo había salido del país.
Igualmente, se realizaron tres registros en los diferentes inmuebles utilizados para dar cobijo a las jóvenes. En estos registros se intervino varios teléfonos móviles, material informático, documentación, ropa pertenecientes a las víctimas, una placa falsa de la Guardia Civil, varias armas simuladas y 400 euros en efectivo.
Tres de los detenidos mayores de edad, con edades comprendidas entre los 24 y 59 años y de nacionalidad española, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Alicante. Los cuatro menores detenidos, de 15 y 16 años y de nacionalidades española, rumana y venezolana, fueron puestos a disposición de la Fiscalía de Menores de Alicante, decretando el internamiento de dos de ellas en centros de régimen cerrado. El resto de detenidos fueron puestos en libertad tras ser oídos en declaración en la Comisaría de Alicante.
La investigación continúa abierta con el fin de localizar al presunto cabecilla de la organización, así como para determinar la posible existencia de alguna víctima más.